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Día del Idioma
DESCUBRIENDO LA LECTURA
Sostengo en mis manos un libro y me vienen a la mente recuerdos de la niñez y la adolescencia. Tiempos en los que la lectura aún no había sido descubierta. Época de mi vida en la que no sabía que la lectura era sinónimo de entretenimiento. Tampoco sabía, en ese entonces, que leer un libro tenía la capacidad de despertar la curiosidad y de alimentar la imaginación, que nos enseña nuevas miradas y formas de comprender el mundo. Un buen libro está allí para darte compañía cuando más lo necesitas. Hoy, todo eso, ya lo sé. Nunca es tarde para descubrirlo.
